Cómo y cuánto estoy disfrutando a mi hija! me siento tan bien con ella! a veces se me escapa la tortuga y me saco, pierdo la paciencia... pero ultimamente le pongo mucha onda y nos va re bien juntas.
Regamos, paseamos por el barrio (que buena rutina: todos los días un poquito de playita -pero no le muestro el lago porque sino la pierdo- y plaza -ahí sí la pierdo si o si en el tobogán gigante y peligrosísimo- pero bue).
Nos bañamos juntas, siempre, gracias a las sabias palabras de Jorge Díaz Walker Cuando fui a verlo en septiembre, llorando le dije: "No puedo hacer nada! Ni bañarme puedo" y él me contestó lo que para mí fue una luz, una alternativa hermosa: "Bañese con ella". Santo remedio.
Además, nuestra casa grande, nueva, vacía y blanca, tiene un receptáculo de 1.4mt. x 1.4mt., o sea algo así como una mega bañadera en la que entramos los tres sentados, y además tiene dos duchas, así que nos bañamos con mucha agua, nadie tiene frío y Gaia juega con el shampoo y sus cosas en la mini piletita de natación.
Igual está en una edad "terrible" (como si con el paso del tiempo eso fuera a variar) pero no sólo es así el año y medio de Gai, está hermosa! linda... charleta... Además del clásico Tepig, y Bebe, Mamamamamam, ppppá... hace algo buenísimo:
-Gai, tenés caca?
Se toca el pañal y me mira atenta. Mueve la cabeza de abajo hacia arriba y confirma. (Tiene caca)
-Andá a buscar un pañal limpio
Va lo busca y no sólo eso: Trae la crema con la que la limpio y como el algodón está muy arriba manotea una franelita de anteojos, para que con eso le limpie la cola!
Qué divina...
Con el culito pelado le digo: "Ahora andá al tacho y tiralo. Basura", le recalco para que asocie.
y va, casi corriendo y lo tira!
Me encanta.
Hoy me atreví a recomendarle a la chica que nos atendió en Jauja (con la que hay cierta onda) que tenga un hijo, porque es hermoso. Es muy llenador.
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